Algunos niños con Trastorno del Espectro Autista (TEA), van desarrollando un juego, pero también, hay niños que andan solos, actuando como simples observadores o deambulando por el patio. Por esta razón, se deben crear situaciones para que puedan acceder a este momento lúdico y de relación.
El juego es una parte fundamental en el desarrollo infantil y es agente facilitador para fomentar habilidades sociales, comunicativas, etc., es un área muy importante que debe ser abordado no solamente de manera individual, sino también grupal y qué mejor oportunidad que los recreos en los colegios. Es en este momento donde hay un incremento de oportunidades de socializar y desarrollar relaciones significativas entre los compañeros.
Ahora bien, los tiempos de recreo, podrían ser poco inclusivos, y un espacio difícil para un niño con diversidad funcional. Al respecto, algunos niños con Trastorno del Espectro Autista (TEA), van desarrollando un juego, pero también, hay niños que andan solos, actuando como simples observadores o deambulando por el patio. Por esta razón, se deben crear situaciones para que puedan acceder a este momento lúdico y de relación.
Por lo tanto, para conseguir este propósito, se debe de contar con diferentes recursos como: didácticos (pictogramas, fotos, imágenes, pelotas, cuerdas, columpio, etc.) y tecnológicos (impresora, señales acústicas, televisor, etc.); asimismo, un equipo de responsables (profesoras, auxiliares, psicólogas, etc.) que dirijan y monitoreen el tiempo de recreo. Estas personas deben utilizar diversas estrategias que tengan como objetivo principal promover su inclusión.
Así, para enseñar el cómo empezar y participar en el juego, entre las ayudas se pueden considerar está:
- Elaborar un listado de juegos atractivos de acuerdo a los intereses de todos, con la finalidad de conseguir la motivación, y a partir de ello ir ampliándolos.
- Considerar el número de alumnos por actividad de juego.
- Elaborar guiones de juego ‘paso a paso’ para explicar el juego con los otros niños.
- Utilizar apoyos visuales en el recreo (pictogramas y fotografías) para facilitar la comprensión de las normas de juego (secuencia de juego y la toma de turnos).
- Promover la atención del alumno con ayudas verbales, gestuales o físicas.
- Empezar con un juego estructurado: demostrar (dar modelo) y guiar.
- Desvanecer las ayudas según el niño(a) vaya aprendiendo.
- Establecer rincones de juego (espacios concretos), por ejemplo: juego libre y/o espontáneo, o juegos reglados.
- Considerar la participación del alumno con TEA en relación al tiempo de juego, habilidades y dificultades para brindar la propuesta adecuada de juego.
- Felicitar el esfuerzo del alumno conforme vaya avanzando.
Es importante considerar, que la comunidad educativa debe comprometerse en responder las necesidades de todos los alumnos y realizar todas las acciones encaminadas para que se desarrollen en forma óptima. La inclusión es tarea de todos los agentes que participan en el contexto escolar y deben ir en búsqueda de un ambiente educativo placentero y flexible a la neurodiversidad.
El Centro Peruano de Audición, Lenguaje y Aprendizaje – CPAL con el objetivo de llevar la mejor atención a más personas, presenta la nueva sede Magdalena, en la que se brindaran los servicios de diagnóstico y tratamiento en las áreas de audición, lenguaje, habla, voz y aprendizaje en niños, adolescentes y adultos.